Biografía:
Joaquín Gallegos Lara nació en 1911 en Guayaquil. Nació con un grave problema en su columna vertebral, el cual produjo que sus piernas de atrofien al punto de no poder caminar. No acudió a ninguna escuela, por lo que su educación fue autodidacta, dedicó toda su niñez y juventud a llenarse de conocimiento, llegando a dominar diferentes idiomas como el alemán, italiano, francés y ruso.
Por el año 1927 su personalidad y amplia cultura llamaron la atención a numerosos jóvenes que se reunían en su casa a conversar con él. Fue así como conoció a Demetrio Aguilera Malta, quien más tarde le presentó a Enrique Gil Gilbert, y en poco tiempo nació entre los tres una inseparable amistad.
Producto de esta unión apareció en 1930 la obra “Los Que se Van”, que incluye varios cuentos de los tres escritores amigos, y con la que se inició al realismo social en el Ecuador.
A ellos se unieron posteriormente Alfredo Pareja Diezcanseco y José de la Cuadra, y juntos formaron el “Grupo Guayaquil”.
En 1943, como miembro del Partido Comunista que dirigía Pedro Saad formó parte de Acción Democrática Ecuatoriana, organización política de oposición al régimen constitucional del Dr. Carlos Alberto Arroyo del Río.
Murió en su ciudad natal, Guayaquil, el 16 de noviembre de 1947.
Obras:
El militante Joaquín Gallegos Lara era conocido principalmente por ser escritor y novelista. Sus obras siempre estuvieron dirigidas al público lector (sobre todo lectores de izquierda y de extrema izquierda), todo con la finalidad de expresar sus pensamientos y emociones.
Sus obras literarias tuvieron peso en el publico lector, ya que los cuentos iban dirigidos aquellas personas que necesitaban un rayo de esperanza, las que tuvieron más peso en la literatura fueron las siguientes:
- Los que se van (1930)
El libro los que se van fue escrito en 1930 principalmente por el militante Joaquín Gallegos Lara, con colaboración de junto a Demetrio Aguilera Malta y Enrique Gil Gilbert, ellos llegaron a pertenecer el grupo de sociedad literaria mejor conocido como "el Grupo de Guayaquil".los cuales plasmaron una pequeña muestra de la vida de los campesinos costeño del país Ecuador. A su vez, ambientada en el campo de la costa ecuatoriana, los cuentos relatan la historia de unos cuantos protagonistas que hacían representación al montubio y al cholo en su día día tras vivir en la miseria y sus relaciones con su entorno, tanto familiar como en el mismo pueblo.
- Las cruces sobre el agua (1946)

Una novela que fue escrita por él y a su vez, fue publicada en el año 1946, este libro situó al militante en medio de los iniciadores de los temas urbanos. El final y el detonante ruidoso argumental de este libro, fue la huelga general donde hubo la masacre del día 15 del mes de noviembre del año 1922.
Además, esta novela pertenece a una época de la vanguardia del realismo socialista ecuatoriano, siendo este mucho menos costumbrista y siendo removido su atmósfera hacia las ciudades inmensas.
- El Guaraguao
Este cuento fue narrado por el Grupo Guayaquil, entre ellos se encuentra Enrique Gil Gilbert, Demetrio Aguilera Malta, Alfredo Pareja Diezacanseco y principalmente Joaquín Gallegos Lara. los aportes de esta literatura no tienen critica alguna, ya que este libro habla del Grupo de Guayaquil, algunos de los integrantes de ese famoso grupo local, fueron señalados como precedentes del realismo mágico, cuya corriente que posiciona la nueva narrativa suramericana de aquel tiempo en un lugar sublime en la trama mundial.
- Los Guandos (1983)
El militante narrador Joaquín Gallegos Lara no logro finalizar el libro Los Guandos, ya que en 1947 murió por problemas de salud, sin embargo, la narradora Nela Martínez fue la que dio culminación del libro, esta mujer quien acompaño también en los disturbios a Joaquín Gallegos en los años 20, a su vez, era su compañera sentimental.
Este libro expresa lo que tuvieron que sufrir los indios del país Ecuador en cuanto a las humillaciones en forma de trabajo durante décadas, todo esto fue recolectándose de manera progresiva, ya que cada denuncia de los indios era expresada a los oídos de Joaquín Gallegos Lara, y Nela Martínez hizo seguimiento de dicha recolección para así, culminar dicho libro.